Estos gauchos gringos (polacos, judíos, italianos, alemanes, etc), con tierra debajo de las uñas, son la última resistencia ante el avance de la frontera sojera, que ya ha tentado a otras familias campesinas a vender o arrendar. Son los verdaderos hijos de la tierra...
(Eduardito, primo de Cristina, mi esposa)